Colombia ha vivido grandes crisis a través de los años, crisis que permiten, gracias al aprendizaje que ésta genera, el desarrollo humano y la esperanza espiritual para lograr una reflexión en la convivencia. El problema de pasar de una economía cafetera a una economía minera ha ocasionado, por ejemplo, que los recursos naturales sean hoy la base del mal llamado "desarrollo", "progreso" y "crecimiento".
El texto, resultado del proceso de investigación de la tesis doctoral "El estado colombiano y el buen vivir, un proyecto político-educativo", muestra que el problema social de esta crisis civilizatoria es el camino para conscientizar las generaciones presentes, en la búsqueda de incrementar el índice de Felicidad y el Buen Vivir y, con ello, generar espacios que motiven una relación amigable entre el ser humano y la naturaleza. Este texto constituye su cuarto libro después de: "La vida y sus encrucijadas", "Rehenes del miedo" y "Colombia: política, encanto, amor y odio".