Cada discípulo de Jesús, el Mesías judío, debe entender que el Cuerpo de Cristo tiene raíces hebreas y una relación y responsabilidad bíblica hacia el pueblo judío. Estamos viviendo en un momento en el que Dios está restaurando este entendimiento en la Iglesia. Parte de esta restauración es reconocer que el antisemitismo es más que un mero fenómeno humano, político o económico enfocado en la persecución o destrucción del pueblo judío. Trabajando con su diabólico gemelo, el espíritu del anticristo, han creado estrategias satánicas enfocadas en evitar la segunda venida de Jesús (Yeshua) el Mesías. El Dr. Morgan expone la demoníaca naturaleza del antisemitismo y muestra el significado de lo que supone alinearse con los propósitos proféticos que Dios tiene para la Iglesia y para el pueblo judío. Hay una gran batalla en contra de todo aquél que confronta al antisemitismo y participa de los propósitos de Dios para la Iglesia y el pueblo judío.